LA ALOPECIA TRAS EL PARTO
Durante el embarazo las mujeres ven que su pelo luce mejor que nunca.
La razón está en el efecto de las hormonas del embarazo. En concreto la progesterona.
Esta agradable sensación se termina de modo brusco a los tres meses del parto. El cambio hormonal que conlleva la expulsión de la placenta provoca un recambio brusco del pelo de la parturienta. De un treinta a un cuarenta por ciento de los cabellos de la mujer mueren el día del parto, pero no se desprenden hasta tres o cuatro meses después.
En los cepillos y en las almohadas, a menudo, quedan grandes mechones de cabello, y estas mamás recientes buscan remedio en la farmacia o en la herboristería.
Técnicamente, esta situación se denomina efluvio telógeno, y tiene un pronóstico excelente. Todo el pelo que se desprende cuando el niño tiene tres o cuatro meses de vida se recuperará sin ningún tratamiento cuan do cumpla los seis o siete.
En general, los desprendimientos súbitos de cabello tienen mucho mejor pronóstico que las caídas sutiles.
Es una situación del todo normal y fisiológica, pero algunas mujeres invierten tiempo y dinero en tratamientos variopintos que, "milagrosamente", van a conseguir que el pelo deje de caer y vuelva a salir.
La realidad es que la alopecia post parto se recupera sin necesidad de tratamiento en la totalidad de los casos.
